Donald Trump anuncia arancel del 50% al cobre para proteger la industria nacional

Trump anuncia nuevo arancel del 50% al cobre por razones de seguridad nacional
El expresidente Donald Trump anunció que Estados Unidos impondrá un nuevo arancel del 50% al cobre, una medida que, según explicó, busca proteger la seguridad nacional del país. Esta decisión fue comunicada durante una reunión de su gabinete, generando reacciones inmediatas en los mercados.
La industria del cobre en la mira: impacto en mercados y productores
Tras el anuncio, las acciones de Freeport-McMoran, una de las principales empresas productoras de cobre en Estados Unidos, subieron hasta un 6.1%. Por su parte, los títulos de Southern Copper repuntaron un 2.9%, lo que refleja el fuerte impacto de la medida en el sector financiero y minero.
El cobre se suma a otros productos ya gravados como el acero y el aluminio
Este nuevo arancel se suma a los ya existentes sobre productos como aluminio y acero, que fueron implementados bajo justificaciones similares durante el mandato anterior de Trump. La inclusión del cobre responde a preocupaciones estratégicas sobre su papel en la fabricación de productos considerados críticos para la seguridad nacional, incluyendo sistemas de defensa.
Trump justifica el arancel como medida para proteger la producción nacional
Desde febrero, Trump ya había adelantado su intención de imponer un arancel al cobre. Argumentó que es una medida necesaria ante la creciente sobrecapacidad global, que afecta directamente a los productores estadounidenses. Según datos de Bloomberg, esta situación ha generado una alta dependencia de importaciones en sectores clave, debilitando la producción interna.
El cobre como recurso estratégico para Estados Unidos
El cobre ha sido catalogado como un producto estratégico por su uso en industrias de alta tecnología, infraestructura energética y armamento. La decisión de gravarlo con un arancel del 50% busca incentivar su producción doméstica y reducir la dependencia externa, reforzando así la cadena de suministro nacional.
La medida podría generar repercusiones comerciales a nivel global y tensiones con países exportadores de cobre, pero Trump insiste en que se trata de una acción clave para garantizar la autosuficiencia y seguridad de Estados Unidos.