Estados Unidos revive arancel al jitomate mexicano: golpe del 20.91% por “precios injustos”
Estados Unidos impone arancel del 20.91% al jitomate mexicano: impacto económico y comercial
El gobierno de Donald Trump anunció que a partir del 14 de julio de 2025 se impondrá un arancel del 20.91% sobre la mayoría de las importaciones de jitomate mexicano hacia Estados Unidos. Esta medida se da tras la salida del país del Acuerdo de Suspensión de la Investigación Antidumping sobre Tomates Frescos de México, firmado en 2019.
¿Por qué se aplica este nuevo arancel al jitomate mexicano?
El Departamento de Comercio de Estados Unidos argumenta que el acuerdo vigente no ha protegido de manera adecuada a los productores estadounidenses frente a lo que considera precios injustos por parte de los exportadores mexicanos. Según sus declaraciones, los jitomates mexicanos se han vendido por debajo de su costo, lo que califica como dumping.
Con la cancelación del acuerdo, se reactiva una cuota compensatoria que establece un impuesto del 20.91% sobre la entrada de jitomates mexicanos al mercado estadounidense, encareciendo su precio final para los consumidores.
Importancia del jitomate mexicano en el mercado internacional
México es uno de los 10 principales productores de jitomate a nivel mundial, cubriendo el 24.7% de la oferta global, de acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER). En 2023, México exportó 1.8 millones de toneladas de tomate a Estados Unidos, con un valor aproximado de 2,800 millones de dólares, convirtiéndose en uno de los productos agroalimentarios más importantes para la economía mexicana.
Además de Estados Unidos, otros destinos relevantes del jitomate mexicano son Canadá, Japón, Guatemala, Honduras, Costa Rica, Emiratos Árabes Unidos, Venezuela, Belice y Brasil.
Consecuencias económicas para México y Estados Unidos
El secretario de Agricultura de México, Julio Berdegué, advirtió que esta decisión afectará a miles de trabajadores del campo en México y también tendrá consecuencias para los consumidores estadounidenses. “El 90% de los tomates que importan en Estados Unidos son mexicanos. Seis de cada diez tomates que consumen allá se producen aquí. Si aplican esta medida, sus ensaladas, su kétchup y todo lo que lleve jitomate les va a salir más caro”, expresó Berdegué.
Por su parte, empresarios mexicanos respaldaron al gobierno federal en su postura, al señalar que las acusaciones de dumping no tienen sustento comercial. Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas, consideró que la medida estadounidense responde más a presiones políticas internas que a razones técnicas.
Antecedentes de tensiones comerciales entre Trump y México
Desde su regreso a la Casa Blanca en enero de 2025, Donald Trump ha colocado a México como uno de los principales focos de su política comercial. En marzo, junto con Canadá, fue de los primeros países en enfrentar aranceles del 25% como represalia por la supuesta inacción en temas como la migración y el tráfico de fentanilo.
Aunque algunas de estas medidas fueron suspendidas, México sigue enfrentando aranceles al acero, aluminio y automóviles, lo que suma más presión a las relaciones bilaterales.
¿Qué sigue tras la salida del acuerdo antidumping?
El gobierno mexicano ha confirmado que se abre un periodo de 90 días para negociar con Estados Unidos. Durante este tiempo se buscará llegar a un nuevo entendimiento que permita eliminar o reducir el impacto del arancel.
Sin embargo, si no se alcanza un acuerdo, los productores mexicanos podrían enfrentar fuertes pérdidas y se vería afectada la competitividad del jitomate mexicano en su principal mercado de exportación.
Resumen de los puntos clave
- Estados Unidos aplicará un arancel del 20.91% al jitomate mexicano desde el 14 de julio de 2025.
- La medida surge tras cancelar el acuerdo antidumping firmado en 2019.
- México exportó 1.8 millones de toneladas de jitomate a Estados Unidos en 2023.
- La industria mexicana advierte afectaciones a trabajadores del campo y al consumidor estadounidense.
- Se abre un periodo de 90 días para buscar acuerdos bilaterales.
Este nuevo capítulo en las relaciones comerciales México–Estados Unidos pone en juego no solo el futuro del jitomate mexicano, sino también la estabilidad de uno de los intercambios agrícolas más importantes del continente.
