China redefine el juego: Mitsubishi y otras marcas extranjeras huyen del mercado automotriz

China redefine el juego: Mitsubishi y otras marcas extranjeras huyen del mercado automotriz

La industria automotriz en China, que alguna vez fue considerada una “mina de oro” para los fabricantes tradicionales, se ha transformado en una auténtica pesadilla, encendiendo las alarmas en decenas de empresas automotrices globales. Marcas internacionales de renombre como Mitsubishi han decidido retirarse por completo del mercado chino, mientras que Stellantis se ha declarado en quiebra dentro del país asiático, y Volkswagen ha anunciado el cierre de su planta en Nanjing. Esta dramática situación, que se ha desarrollado en los últimos años y culmina con decisiones recientes en 2023 y 2025, se debe principalmente al declive de ventas, la acelerada transformación de la industria china hacia la electrificación y la feroz competencia de las marcas locales, a quienes los consumidores chinos ahora prefieren casi exclusivamente.

Mitsubishi abandona China tras dos décadas de presencia en el país

Mitsubishi, que llevó más de 20 años operando en China, ha puesto fin a su última empresa conjunta en el país, marcando su retirada definitiva del mercado automovilístico asiático. La compañía japonesa anunció la disolución de su acuerdo con Shenyang Aerospace Mit. Engine Mfg. Ltd., una firma clave desde finales de los años 90. Esta decisión sigue al cese de la producción de vehículos Mitsubishi en China en 2023, como parte de una reestructuración estratégica frente al acelerado avance del país hacia la electrificación.

La historia de Mitsubishi en China comenzó en 1973 con la exportación de camiones. En 1998, se aliaron con Shenyang Aerospace Mit. Engine. Mfg. Ltd. para fabricar motores. Sin embargo, el intento más ambicioso fue la creación en 2012 de la empresa conjunta GAC Mitsubishi con Guangzhou Automobile Group (GAC). Aunque las ventas alcanzaron un máximo de 144,000 unidades en 2018, impulsadas principalmente por el SUV Outlander, cayeron drásticamente a 33,600 unidades en 2022 debido a la feroz competencia local de vehículos eléctricos.

La situación financiera de GAC Mitsubishi se volvió insostenible en 2023, registrando pasivos que superaban los activos por más de 1,400 millones de yuanes. En octubre de 2023, Mitsubishi anunció la paralización total de su producción y su salida operativa. Posteriormente, GAC asumió el control total de la planta, que ahora se utiliza para fabricar modelos de su marca eléctrica Aion. La antigua Shenyang Aerospace Mitsubishi también fue rebautizada como Shenyang Guoqing Power Technology Co., Ltd. el 2 de julio de 2025, eliminando a Mitsubishi Motors y Mitsubishi Corporation de su accionariado.

Volkswagen, Stellantis y Porsche también enfrentan la caída en ventas

El caso de Mitsubishi no es un incidente aislado:

  • Stellantis, considerado el grupo automotriz más grande del mundo por número de marcas, recientemente se declaró en quiebra en China tras una imparable caída en ventas. Curiosamente, Stellantis también tenía una alianza con GAC.
  • Volkswagen ha anunciado el cierre de su planta de Nanjing, China, que operaba desde 2008 en alianza con SAIC Motor y se utilizaba para fabricar el Passat chino y modelos Skoda.
  • Porsche también está sufriendo en China, con sus ventas disminuyendo un 28% en los primeros meses del año. Los años en los que Porsche reinaba en el segmento de lujo y deportivos han quedado atrás, principalmente debido a la creciente competencia de fabricantes locales como el Xiaomi SU7.

Incluso Tesla, a pesar de su liderazgo en vehículos eléctricos, ha mantenido un crecimiento marginal de solo 0.8% en China en comparación con el año anterior. Esto contrasta fuertemente con su principal rival, BYD, que registra un incremento de ventas anual cercano al 11%.

Fabricantes chinos como BYD y Xiaomi dominan el mercado local y global

El éxito de empresas como BYD, Xiaomi y Geely está poniendo en jaque las operaciones de lo que alguna vez fueron los principales fabricantes globales. Los fabricantes chinos no solo están arrasando fuera de sus fronteras, sino que también dominan abrumadoramente el mercado local.

El analista Chen Liwei afirmó que “El panorama automovilístico en China se ha convertido en un campo de batalla para la innovación en vehículos eléctricos, donde las marcas históricas tienen cada vez más difícil competir”. La electrificación ha dejado de ser una opción para convertirse en un camino sin retorno, y las marcas locales están a la vanguardia. BYD, por ejemplo, ya está instalando una red de cargadores superrápidos en China con una velocidad de carga superior a la de Tesla.

Implicaciones y Perspectivas Futuras

La retirada de Mitsubishi y las dificultades de otros fabricantes reflejan el hecho de que China ha cambiado las reglas del juego en su mercado automotriz. A pesar de los esfuerzos por lanzar modelos electrificados como el Mitsubishi Airtrek EV, la firma no logró generar las ventas necesarias en un mercado dominado por vehículos inteligentes, conectados y de nueva energía.

Por ahora, esta situación se da únicamente en China, pero el artículo de Motorpasión México sugiere que podría ser “cuestión de tiempo para que los problemas se extiendan oficialmente al resto del mundo”. Ante este panorama, Mitsubishi busca replantear su posición, concentrándose en modelos electrificados y asociaciones estratégicas en otras regiones como el sudeste asiático y Europa.

Valentina Rodríguez