Starbucks: la drástica estrategia de cierres y despidos para su transformación en Norteamérica

La cadena de cafeterías más famosa del mundo, Starbucks, confirmó el cierre de aproximadamente 500 locales en Norteamérica (abarcando Estados Unidos y Canadá), junto con una significativa reducción de personal que incluye la eliminación de 900 puestos corporativos. La drástica medida, anunciada recientemente e implementada como parte de un programa de reestructuración, impactará a tiendas con bajo rendimiento y a empleados de oficinas y áreas administrativas. La compañía espera concretar las clausuras antes de que finalice el año fiscal 2025.
Del formato “solo para recoger” a la modernización de más de 1,000 cafeterías
La decisión de cerrar cientos de tiendas y reducir su fuerza laboral forma parte del plan estratégico denominado “De vuelta a Starbucks” (“Back to Starbucks”). Este programa fue diseñado con el objetivo principal de recuperar las ventas después de registrar seis trimestres consecutivos de caídas en Estados Unidos.
El ajuste tiene un valor estimado de 1,000 millones de dólares y busca reorientar la inversión hacia la experiencia en cafetería y la cercanía con los clientes. El CEO de Starbucks, Brian Niccol, quien asumió la dirección en 2024, ha impulsado este giro radical, buscando reducir costos, mejorar el servicio al cliente y modernizar el diseño de las cafeterías.
El futuro de los empleados afectados y la promesa de un nuevo crecimiento para 2026
La reestructuración incluye el cierre de tiendas que no cumplen con las expectativas financieras o de servicio al cliente, lo que representa un recorte neto de alrededor del 1% de sus locales en Norteamérica. Como parte de estos cierres, se incluye la clausura de espacios emblemáticos, como la histórica tostadora en Seattle. Además, la compañía busca poner fin al formato de cafeterías “pickup-only” (solo para pedidos móviles), las cuales serán cerradas o transformadas de aquí a 2026. En Texas, por ejemplo, ya se confirmaron al menos 20 direcciones que cerrarán, incluyendo puntos en Dallas, Houston y San Antonio.
Para los miles de trabajadores afectados por el cierre de tiendas, la empresa aseguró que hará lo posible por trasladar al personal a otras sucursales cercanas. A quienes queden fuera del sistema, se les ofrecieron indemnizaciones integrales y programas de apoyo. Adicionalmente a los despidos corporativos, el plan incluye la congelación de contrataciones y la suspensión de varios procesos abiertos.
Starbucks espera cerrar el ejercicio fiscal con 18,300 sucursales activas en Norteamérica, mientras que el plan a futuro incluye la promesa de volver a crecer y rediseñar más de 1,000 cafeterías para 2026. Según Niccol, la meta es “seguir gestionando cuidadosamente los costos e invirtiendo en áreas clave que aseguren el crecimiento a largo plazo“.