Jueza bloquea intento de Trump de expulsar a estudiantes extranjeros de Harvard

Jueza bloquea intento de Trump de expulsar a estudiantes extranjeros de Harvard

Una jueza federal en Massachusetts bloqueó la orden de la
administración de Donald Trump que buscaba revocar la certificación
del programa de estudiantes internacionales en Harvard, tras una demanda presentada por la universidad.
La medida del gobierno afectaría a más de 7 mil estudiantes internacionales y, según la institución,
representa un ataque contra su independencia académica.

La jueza Allison Burroughs, del tribunal de distrito de Massachusetts, emitió una orden que prohíbe al gobierno de Trump
implementar la revocación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVP), al menos hasta la audiencia preliminar
programada para el 29 de este mes.

La decisión judicial responde a una demanda presentada por la Universidad de Harvard, que argumentó que esta política
violaba la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense y tendría un impacto devastador en la comunidad académica.

“Esta revocación forma parte de una represalia por nuestra negativa a renunciar a nuestra
independencia académica”, expresó Alan Garber, rector de Harvard, en una carta dirigida a su comunidad universitaria.

Universidades de Asia y Europa respaldan a estudiantes internacionales

El conflicto ha tenido repercusiones internacionales. El gobierno chino advirtió que la medida dañará la posición global de Estados Unidos.
Universidades de Hong Kong se ofrecieron a recibir a estudiantes internacionales afectados, mientras que países europeos como
Alemania han propuesto incluso establecer un “campus en el exilio” para Harvard.

En 2024, Harvard contaba con 6,703 estudiantes internacionales, de los cuales más de
mil provenían de China y cerca de 800 de India, lo que revela el alto impacto que tendría la revocación de visados en su comunidad.

Europa lanza programas para atraer científicos tras medidas de Trump

La administración Trump también ha acusado a universidades como
Columbia, Cornell y Princeton de no proteger a estudiantes judíos ante protestas propalestinas tras el conflicto en Gaza.

Estas acusaciones han servido como justificación para recortar fondos, presionar reformas curriculares y
exigir control sobre políticas de diversidad y admisión. Solo en Harvard, el gobierno recortó 2,600 millones de dólares
en financiamiento y amenazó su estatus de organización sin fines de lucro.

Las medidas restrictivas han generado una creciente fuga de talentos académicos. Países como
Francia, Alemania, España y Reino Unido han lanzado programas millonarios para atraer científicos,
facilitando visados y fondos especiales. La Unión Europea anunció un fondo de 500 millones de euros, y
Francia destinó 100 millones para convertir al país en un refugio para la ciencia.

Pese a las presiones, Harvard mantiene su postura y ha iniciado demandas para recuperar el financiamiento,
preservar su autonomía y proteger a su comunidad internacional. También ha anunciado
recursos de apoyo para sus investigadores. La administración Trump ha señalado que podría
negociar con las universidades para resolver el conflicto, aunque mantiene su línea de confrontación.

Valentina Rodríguez