China y Estados Unidos reactivan tregua comercial y alivian tensiones por tierras raras
China reafirma su compromiso con la tregua comercial pactada con Estados Unidos
China confirmó este jueves que la tregua comercial con Estados Unidos se mantiene encaminada tras las negociaciones recientes celebradas en Londres. El país asiático reiteró su intención de continuar con el diálogo bilateral y revisará las licencias de exportación según la ley y los acuerdos establecidos con Washington.
China llama al respeto mutuo tras negociaciones con Estados Unidos
El portavoz del Ministerio de Comercio chino, He Yadong, afirmó que ambas naciones seguirán manteniendo una comunicación abierta para reducir malentendidos y fomentar un desarrollo económico “estable y duradero”. Aunque no se ofrecieron detalles concretos sobre cifras o plazos de los acuerdos alcanzados, el tono conciliador de Pekín contrasta con las tensiones verbales de semanas anteriores.
En esas semanas, ambos países se habían acusado mutuamente de romper la tregua acordada en Ginebra en mayo. Sin embargo, los resultados de las conversaciones en Londres parecen haber puesto nuevamente en marcha un acercamiento comercial.
Trump afirma que el acuerdo incluye nuevos aranceles bilaterales
Desde Washington, el presidente Donald Trump sostuvo que el nuevo pacto incluye un arancel del 55% por parte de Estados Unidos a productos chinos, y uno del 10% de China hacia productos estadounidenses. Sin embargo, las autoridades chinas no han confirmado estas cifras.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Lin Jian, destacó que China “siempre cumple con sus compromisos” y pidió a Estados Unidos reciprocidad y respeto a lo acordado en la capital británica.
Se destraba el conflicto por las tierras raras, pero persiste la cautela
China empieza a aprobar solicitudes de exportación de tierras raras
Uno de los puntos más delicados del acuerdo fue el referido a las exportaciones de tierras raras. Pekín había restringido estas ventas desde abril, afectando a sectores estratégicos en Estados Unidos. Ahora, China ha empezado a aprobar ciertas solicitudes de licencia, aunque no se ha revelado ni el volumen ni los beneficiarios.
Según declaraciones oficiales, las licencias se otorgan conforme a la legislación vigente, considerando “las necesidades y preocupaciones razonables” de otros países en usos civiles. De acuerdo con el Wall Street Journal, las licencias otorgadas tendrían una validez de seis meses, lo que permitiría a China mantener herramientas de presión en caso de nuevos roces comerciales.
Analistas destacan que el acuerdo aún es frágil
Expertos y consultoras han recibido con prudencia el resultado de las negociaciones. Para Mark Williams, de Capital Economics, el pacto podría limitarse a aliviar algunas barreras no arancelarias sin resolver el fondo del problema. “Es como volver un mes atrás. Para Trump eso es suficiente, aunque no haya avances reales”, apuntó.
Por su parte, la consultora Trivium China opinó que el entendimiento podría destrabar el tema de las tierras raras y abrir el camino a una relación comercial más estable. En tanto, el diario chino Global Times señaló que se ha establecido un “marco de trabajo” útil para resolver los problemas recientes y urgió a Washington a mostrar “sinceridad” con acciones concretas.
Antecedentes: la tregua de Ginebra y las nuevas medidas
En la reunión de Ginebra en mayo, China y Estados Unidos habían acordado una tregua temporal de 90 días en la que Pekín reduciría los aranceles sobre productos estadounidenses del 125% al 10%, mientras que Washington bajaría los suyos del 145% al 30% sobre bienes chinos.
Las conversaciones en Londres, celebradas tras acusaciones mutuas de incumplimiento, parecen haber reactivado ese pacto. Aun así, el riesgo de un nuevo conflicto comercial persiste si no se concretan mecanismos de verificación y cumplimiento mutuo.
El futuro de la relación comercial entre ambas potencias dependerá, según expertos, de la capacidad de ambos gobiernos para cumplir lo pactado, actuar con transparencia y reducir las tensiones políticas que siguen marcando su relación bilateral.
