Fitch mantiene calificación de México pero advierte sobre desafíos fiscales
Fitch Ratings mantiene la calificación crediticia de México, pero advierte sobre desafíos fiscales
Fitch Ratings ha decidido ratificar la calificación crediticia de México en ‘BBB-’ en moneda extranjera a largo plazo, manteniendo también la perspectiva estable, según un informe publicado el miércoles por la agencia calificadora. A pesar de la estabilidad en la calificación, Fitch subraya que hay varios factores que podrían limitar la perspectiva de crecimiento económico en el país.
Factores que sustentan la calificación crediticia de México
La calificación de México está respaldada por un marco de política macroeconómica prudente, finanzas externas robustas y una economía grande y diversificada. Según Fitch, estos elementos proporcionan una base sólida para la calificación a largo plazo, a pesar de los desafíos que enfrenta el país.
Desafíos fiscales y factores limitantes
Sin embargo, la calificadora también menciona varios factores que limitan la calificación de México. Entre estos, destaca el crecimiento moderado a largo plazo, indicadores de gobernanza deficientes y, sobre todo, los desafíos fiscales, como la baja base de ingresos y las rigideces presupuestarias que dificultan la ejecución de políticas fiscales más efectivas. Además, los pasivos contingentes de Pemex siguen siendo una preocupación importante.
Perspectivas de crecimiento económico y pronóstico para 2025
Respecto al crecimiento económico de México, Fitch prevé una contracción del 0.4% en el Producto Interno Bruto (PIB) para 2025. Este pronóstico se basa en la incertidumbre derivada de los aranceles impuestos por Estados Unidos, los ajustes fiscales en México y la desaceleración de la economía estadounidense. Para 2026, se espera una recuperación modesta del 0.8% del PIB.
Preocupaciones por los aranceles de Estados Unidos y su impacto en el comercio
Fitch también destaca que México es especialmente vulnerable a los cambios en la política comercial de Estados Unidos. La relación económica entre ambos países es crucial, ya que las exportaciones mexicanas a Estados Unidos representan aproximadamente el 27% del PIB mexicano en 2024. Los aranceles impuestos recientemente han afectado principalmente al sector automotriz y continúan generando incertidumbre sobre la actividad económica en el país.
Factores fiscales y deuda pública que presionan la calificación
A pesar de la incertidumbre económica, Fitch asegura que la calificación de México tiene margen para soportar los efectos de un entorno económico más complejo. Sin embargo, el déficit fiscal sigue siendo una preocupación, con un déficit de 5.7% del PIB proyectado para 2024, aunque se espera que este porcentaje baje a 3.9% en el corto plazo. Este déficit se ha visto impulsado por factores como el aumento del gasto social, los megaproyectos públicos y los mayores costos de los intereses, junto con las pérdidas operativas de Pemex.
Desaceleración económica y sus posibles repercusiones
Fitch considera que la desaceleración económica ya en curso podría empeorar debido a un giro agresivo hacia el proteccionismo comercial en Estados Unidos bajo la administración Trump. A pesar de esto, la calificadora no anticipa una caída significativa y duradera de la calificación crediticia de México. La agencia también espera que la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum mantenga sus objetivos de consolidación fiscal en medio de este difícil contexto.
Plan México y la incertidumbre sobre la relación comercial con Estados Unidos
Fitch considera que el Plan México, propuesto por la presidenta Claudia Sheinbaum, busca mejorar las perspectivas de crecimiento a través de un modelo económico que involucra tanto al sector privado como al Estado. Aunque la nueva legislación del sector energético refuerza la primacía de las empresas públicas, también introduce nuevas modalidades de colaboración con el sector privado. Sin embargo, persisten dudas sobre el grado de adopción de estas políticas, dadas las preocupaciones sobre el entorno empresarial y las reformas judiciales recientes.
Conclusión sobre la calificación crediticia y la situación económica de México
En resumen, Fitch mantiene la calificación crediticia de México en ‘BBB-’ con una perspectiva estable. No obstante, los factores como la desaceleración económica, el contexto fiscal complicado y la incertidumbre derivada de los aranceles estadounidenses podrían seguir limitando las perspectivas de crecimiento a largo plazo. La calificación actual refleja un equilibrio entre los factores positivos y negativos, con margen para enfrentar los desafíos económicos, pero bajo la condición de que se mantengan las políticas fiscales y económicas actuales.
